Declan Patrick MacManus llevaba una aparente vida convencional, casado y con hijo, y empleándose en diferentes trabajos administrativos. No obstante, componía y movía sus maquetas hasta que la independiente Stiff Records le contrató; Jack Riviera, director del sello, le propuso una identificación artística más sugerente, combinando el nombre de Elvis Presley y su segundo apellido materno, Costello.